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GUÍA PARA LAPREPARACIÓN LITÚRGICAPORCUARESMAEL TRIDUO PASCUALSAGRADOY LA PASCUA2017CORTESÍA DE LAFEDERACIÓN DE COMISIONESLITÚRGICAS DIOCESANAS
RECONOCIMIENTOSRitual de la Penitencia, sexta edición agosto 2013. Conferencia del EpiscopadoMexicano.Extractos del Leccionario para la Misa para uso en las Diócesis de los EstadosUnidos de América, segunda edición típica 2001, 1998, 1997, 1986, 1970Confraternidad de Doctrina Cristiana, Inc., Washington, DC. Se utiliza con permiso.Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este texto puede serreproducida por cualquier medio sin el permiso por escrito del propietario de losderechos de autor.Fotografía de Portada (de arriba para abajo)“Crucificción” por Antony van Dyck, 1622“La Resurrección” por Fra Angélico, 1442 (Museo de San Marco, Florencia)Detalle de “Pentecostés” por Jean Il Restout (1692-1768)Preparado por Rita A. Thiron, M.A.Directora EjecutivaFederación de Comisiones Litúrgicas Diocesanas415 Michigan Avenue, NE Suite 70Washington, DC 20017202-635-6990www.fdlc.orgTraducio por Andrea Proaño2
GUÍA PARA LA PREPARACIÓN LITÚRGICA PORCUARESMA, EL TRIDUO PASCUAL SAGRADO Y LATEMPORADA DE PASCUA2017 CONTENIDOS Mensaje del Papa Francisco por la CuaresmaRito de Reconciliación de los Penitentescon Confesión Individual y Lecturas de AbsoluciónEjemplos de PenitenciasSugerencias MusicalesPreguntas FrecuentesCalendario Litúrgico paraCuaresma, Triduo Pascual y la temporada de PascuaLeccionario para la Misa – Año AHojas de Preparación para el Triduo Pascual SagradoEnlaces a Recursos Adicionales de la USCCB3
MENSAJE DEL SANTO PADREPAPA FRANCISCOPARA LA CUARESMA 2017Queridos hermanos y hermanas:La Cuaresma es un nuevo comienzo, un camino que nos lleva a un destino seguro: la Pascua de Resurrección,la victoria de Cristo sobre la muerte. Y en este tiempo recibimos siempre una fuerte llamada a la conversión: elcristiano está llamado a volver a Dios «de todo corazón» (Jl 2,12), a no contentarse con una vida mediocre,sino a crecer en la amistad con el Señor. Jesús es el amigo fiel que nunca nos abandona, porque inclusocuando pecamos espera pacientemente que volvamos a él y, con esta espera, manifiesta su voluntad deperdonar (cf. Homilía, 8 enero 2016).La Cuaresma es un tiempo propicio para intensificar la vida del espíritu a través de los medios santos que laIglesia nos ofrece: el ayuno, la oración y la limosna. En la base de todo está la Palabra de Dios, que en estetiempo se nos invita a escuchar y a meditar con mayor frecuencia. En concreto, quisiera centrarme aquí en laparábola del hombre rico y el pobre Lázaro (cf. Lc 16,19-31). Dejémonos guiar por este relato tan significativo,que nos da la clave para entender cómo hemos de comportarnos para alcanzar la verdadera felicidad y la vidaeterna, exhortándonos a una sincera conversión.1. El otro es un donLa parábola comienza presentando a los dos personajes principales, pero el pobre es el que viene descrito conmás detalle: él se encuentra en una situación desesperada y no tiene fuerza ni para levantarse, está echado a lapuerta del rico y come las migajas que caen de su mesa, tiene llagas por todo el cuerpo y los perros vienen alamérselas (cf. vv. 20-21). El cuadro es sombrío, y el hombre degradado y humillado.La escena resulta aún más dramática si consideramos que el pobre se llama Lázaro: un nombre repleto depromesas, que significa literalmente «Dios ayuda». Este no es un personaje anónimo, tiene rasgos precisos yse presenta como alguien con una historia personal. Mientras que para el rico es como si fuera invisible, paranosotros es alguien conocido y casi familiar, tiene un rostro; y, como tal, es un don, un tesoro de valorincalculable, un ser querido, amado, recordado por Dios, aunque su condición concreta sea la de un desechohumano (cf. Homilía, 8 enero 2016).Lázaro nos enseña que el otro es un don. La justa relación con las personas consiste en reconocer con gratitudsu valor. Incluso el pobre en la puerta del rico, no es una carga molesta, sino una llamada a convertirse y acambiar de vida. La primera invitación que nos hace esta parábola es la de abrir la puerta de nuestro corazónal otro, porque cada persona es un don, sea vecino nuestro o un pobre desconocido. La Cuaresma es untiempo propicio para abrir la puerta a cualquier necesitado y reconocer en él o en ella el rostro de Cristo. Cadauno de nosotros los encontramos en nuestro camino. Cada vida que encontramos es un don y merece acogida,respeto y amor. La Palabra de Dios nos ayuda a abrir los ojos para acoger la vida y amarla, sobre todo cuandoes débil. Pero para hacer esto hay que tomar en serio también lo que el Evangelio nos revela acerca delhombre rico.Lázaro nos enseña que el otro es un don. La justa relación con las personas consiste en reconocer con2. Elgratitudpecado sunosciegavalor.Incluso el pobre en la puerta del rico, no es una carga molesta, sino una llamada aconvertirse y a cambiar de vida.
La parábola es despiadada al mostrar las contradicciones en las que se encuentra el rico (cf. v. 19). Estepersonaje, al contrario que el pobre Lázaro, no tiene un nombre, se le califica sólo como «rico». Su opulenciase manifiesta en la ropa que viste, de un lujo exagerado. La púrpura, en efecto, era muy valiosa, más que laplata y el oro, y por eso estaba reservada a las divinidades (cf. Jr 10,9) y a los reyes (cf. Jc 8,26). La tela era deun lino especial que contribuía a dar al aspecto un carácter casi sagrado. Por tanto, la riqueza de este hombrees excesiva, también porque la exhibía de manera habitual todos los días: «Banqueteaba espléndidamentecada día» (v. 19). En él se vislumbra de forma patente la corrupción del pecado, que se realiza en tresmomentos sucesivos: el amor al dinero, la vanidad y la soberbia (cf. Homilía, 20 septiembre 2013).El apóstol Pablo dice que «la codicia es la raíz de todos los males» (1 Tm 6,10). Esta es la causa principal de lacorrupción y fuente de envidias, pleitos y recelos. El dinero puede llegar a dominarnos hasta convertirse en unídolo tiránico (cf. Exh. ap. Evangelii gaudium, 55). En lugar de ser un instrumento a nuestro servicio parahacer el bien y ejercer la solidaridad con los demás, el dinero puede someternos, a nosotros y a todo el mundo,a una lógica egoísta que no deja lugar al amor e impide la paz.La parábola nos muestra cómo la codicia del rico lo hace vanidoso. Su personalidad se desarrolla en laapariencia, en hacer ver a los demás lo que él se puede permitir. Pero la apariencia esconde un vacío interior.Su vida está prisionera de la exterioridad, de la dimensión más superficial y efímera de la existencia (cf. ibíd.,62).El peldaño más bajo de esta decadencia moral es la soberbia. El hombre rico se viste como si fuera un rey,simula las maneras de un dios, olvidando que es simplemente un mortal. Para el hombre corrompido por elamor a las riquezas, no existe otra cosa que el propio yo, y por eso las personas que están a su alrededor nomerecen su atención. El fruto del apego al dinero es una especie de ceguera: el rico no ve al pobre hambriento,llagado y postrado en su humillación.Cuando miramos a este personaje, se entiende por qué el Evangelio condena con tanta claridad el amor aldinero: «Nadie puede estar al servicio de dos amos. Porque despreciará a uno y querrá al otro; o, al contrario,se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero» (Mt 6,24).3. La Palabra es un donEl Evangelio del rico y el pobre Lázaro nos ayuda a prepararnos bien para la Pascua que se acerca. La liturgiadel Miércoles de Ceniza nos invita a vivir una experiencia semejante a la que el rico ha vivido de manera muydramática. El sacerdote, mientras impone la ceniza en la cabeza, dice las siguientes palabras: «Acuérdate deque eres polvo y al polvo volverás». El rico y el pobre, en efecto, mueren, y la parte principal de la parábola sedesarrolla en el más allá. Los dos personajes descubren de repente que «sin nada vinimos al mundo, y sinnada nos iremos de él» (1 Tm 6,7).También nuestra mirada se dirige al más allá, donde el rico mantiene un diálogo con Abraham, al que llama«padre» (Lc 16,24.27), demostrando que pertenece al pueblo de Dios. Este aspecto hace que su vida seatodavía más contradictoria, ya que hasta ahora no se había dicho nada de su relación con Dios. En efecto, ensu vida no había lugar para Dios, siendo él mismo su único dios.El rico sólo reconoce a Lázaro en medio de los tormentos de la otra vida, y quiere que sea el pobre quien lealivie su sufrimiento con un poco de agua. Los gestos que se piden a Lázaro son semejantes a los que el ricohubiera tenido que hacer y nunca realizó. Abraham, sin embargo, le explica: «Hijo, recuerda que recibiste tusbienes en vida, y Lázaro, a su vez, males: por eso encuentra aquí consuelo, mientras que tú padeces» (v. 25).En el más allá se restablece una cierta equidad y los males de la vida se equilibran con los bienes.La parábola se prolonga, y de esta manera su mensaje se dirige a todos los cristianos. En efecto, el rico, cuyoshermanos todavía viven, pide a Abraham que les envíe a Lázaro para advertirles; pero Abraham le responde:
«Tienen a Moisés y a los profetas; que los escuchen» (v. 29). Y, frente a la objeción del rico, añade: «Si noescuchan a Moisés y a los profetas, no harán caso ni aunque resucite un muerto» (v. 31).De esta manera se descubre el verdadero problema del rico: la raíz de sus males está en no prestar oído a laPalabra de Dios; esto es lo que le llevó a no amar ya a Dios y por tanto a despreciar al prójimo. La Palabra deDios es una fuerza viva, capaz de suscitar la conversión del corazón de los hombres y orientar nuevamente aDios. Cerrar el corazón al don de Dios que habla tiene como efecto cerrar el corazón al don del hermano.Queridos hermanos y hermanas, la Cuaresma es el tiempo propicio para renovarse en el encuentro con Cristovivo en su Palabra, en los sacramentos y en el prójimo. El Señor ―que en los cuarenta días que pasó en eldesierto venció los engaños del Tentador― nos muestra el camino a seguir. Que el Espíritu Santo nos guíe arealizar un verdadero camino de conversión, para redescubrir el don de la Palabra de Dios, ser purificados delpecado que nos ciega y servir a Cristo presente en los hermanos necesitados. Animo a todos los fieles a quemanifiesten también esta renovación espiritual participando en las campañas de Cuaresma que muchasorganizaciones de la Iglesia promueven en distintas partes del mundo para que aumente la cultura delencuentro en la única familia humana. Oremos unos por otros para que, participando de la victoria de Cristo,sepamos abrir nuestras puertas a los débiles y a los pobres. Entonces viviremos y daremos un testimoniopleno de la alegría de la Pascua.Vaticano, 18 de octubre de 2016Fiesta de san Lucas Evangelista.FRANCISCO Libreria Editrice Vaticana, 2016Utilizado con el permiso generoso del Prof. D. Giuseppe Costa, sdb, DirectorLa raíz de sus males estaba en no prestar oído a la Palabra de Dios; esto es lo que le llevó a noamar ya a Dios y por tanto a despreciar al prójimo.La Palabra de Dios es una fuerza viva, capaz de suscitar la conversión del corazón de loshombres y orientar nuevamente a Dios. Cerrar el corazón al don de Dios que habla tiene comoefecto cerrar el corazón al don del hermano.
LIBÉRANOS DE NUESTROS PECADOS RITUAL DE LA PENITENCIA PARA LA CUARESMA 2017RITUAL PARA LA RECONCILIACIÓN DE VARIOS PENITENTESCON CONFESIÓN Y ABSOLUCIÓN INDIVIDUALRitos InicialesProcesión de EntradaSaludo InicialIntroducciónOración de EntradaLiturgia de la Palabra de DiosPrimera LecturaSalmo ResponsorialSegunda LecturaVerso antes del EvangelioEvangelioHomilíaExamen de ConcienciaRito de ReconciliaciónConfesión General del PecadoLetanía de PenitenciaPadre NuestroOración de DespedidaConfesión Individual del Pecado y AbsoluciónProclamación de Alabanza por la Misericordia de DiosRitos de DespedidaBendiciónDespedida y EnvíoHimno de Cierre7
PREPARACIÓN Los Ministros de Hospitalidad deben ser reclutados para dar la bienvenida a laasamblea a medida que vayan llegando y para distribuir ayudas de adoración. Al menos dos lectores deben ser designados para proclamar la (s) lectura (s), leer elExamen de Conciencia, y dirigir la Letanía de Penitencia. Deben sentarse en laasamblea. Músico (s) y cantor (es) debe (n) dirigir a la asamblea para cantar. Se puede tocarmúsica instrumental durante la confesión individual. (Esta guía incluye una lista desugerencias de música). Un leccionario debe estar listo con las lecturas apropiadas. La iluminación puede ser moderada. Las velas deben encenderse en el ambón. Las estaciones para los confesores deben estar preparadas. Los sacerdotes puedenpermanecer de pie o sentarse en áreas aisladas alrededor de la nave principal de laiglesia para recibir a los penitentes. De esta manera se mantiene la naturalezacomunal del rito. Las velas pueden encenderse en las estaciones. En aras de la simplicidad, el que preside la ceremonia puede participar de laprocesión solo o junto al predicador. Los demás sacerdotes podrían estar sentados enel santuario o en un área reservada antes de que comience la liturgia.8
RITOS INICIALESPROCESIÓN DE ENTRADAVer sugerenciasSALUDO INICIALPresidente: Que la Gracia, misericordia, y paz deNuestro Dios PadreY Jesucristo nuestro Salvador esté con ustedes.Asamblea: Y con su espíritu.INTRODUCCIÓNcon estas palabras (u otras similares)Presidente: En esta época de Cuaresma,Cristo nos llama a unaapreciación más profunda de nuestro bautismoy a una realización más profundade nuestra responsabilidad,como seguidores de Cristo,de vivir acorde al Evangelio.Demasiado a menudo, hemos dejado de hacer esto.Con nuestro pecado,hemos buscado la ambición en vez de la santidad,la satisfacción de necesidades individualesen vez del bien común,nos hemos enfocado en los famososen vez de en los marginados,hemos practicado la indiferencia en vez de la empatía,hemos escuchado a miles de vocesantes que escuchar las palabras de Jesús.Esta noche [hoy], El nos ha llamado a cada uno de nosotros a estesacramento,para recordarnoslo bueno que es servir a los más necesitados,cuán justo es seguir la ley del Señor,Y cómo se puede crecer en santidad muriendo a sí mismo para queotros puedan vivir.Una vez más, y aún así, El nos ofrecesu misericordia salvadora.En este momento y en este lugar,y a través de su Iglesia,encontrémonos con el Dios vivo.9
ORACIÓN DE ENTRADAPresidente: Hermanos y hermanas,Dios nos llama a la conversión.Pidámosle, pues,la gracia de un arrepentimiento sincero.Oración en silencioPadre de misericordia y Dios de toda consolación,tú no deseas que el pecador muerasino que se convierta y viva.Venid en ayuda de vuestro pueblo,para que se aparten de sus pecadosy vivan solamente para Ti.Que seamos atentos a vuestra palabra,confesemos nuestros pecados,recibamos vuestro perdón,y estemos siempre agradecidos por vuestra bondad amorosa.Ayúdanos a crecer en la plenitud de Cristo, tu Hijo,que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,un solo Dios, por los siglos de los siglos.Asamblea: Amén.10
LITURGIA DE LA PALABRA DE DIOSLas lecturas que siguen a continuación son sugerencias. Alternativamente, se pueden seleccionarotras lecturas. El predicador puede elegir utilizar una, dos o tres lecturas. Si se elige solamenteuna, es preferible que sea el evangelio. Las lecturas están impresas en otra parte de este folleto,para facilitar el ensayo. Un Leccionario debe ser utilizado durante la liturgia.PRIMERA LECTURAIsaías 58:6-11Compartid vuestro pan con el hambriento.SALMO DE RESPUESTASalmo 32:1-2, 5, 6, 7Feliz el que ha sido absuelto de su pecado.SEGUNDA LECTURA1 Timoteo 6:6-11, 17-19Decid a los ricos que no depositen su confianza en cosastan inciertas como la riqueza, sino en Dios.VERSOLucas 21:36Estad siempre alerta y orad,para estar en pie delante de Dios.EVANGELIOLucas 16:19-31Había un hombre pobre llamado Lázaro.HOMILÍAEl predicador podría desear referirse al mensaje delPapa Francisco por Cuaresma en las páginas 4-6.11
OTROS PASAJES DE LA SAGRADA ESCRITURAPrimera LecturaDeut 4:1, 5-9Oseas 6:1-6Oseas 14:2-10Isaías 53: 1-7, 10-12Guardad los mandamientos y vuestro trabajo estará completoPorque yo deseo amor y no sacrificiosVuelve, Israel, al Señor tu DiosPero El soportó nuestros sufrimientos y cargó con nuestras dolenciasIsaías 54:1-10Jeremías 7:23-28El Señor te llama a volver a ElEscuchad mi vos caminad en los caminos que yo os ordenoSalmo de RespuestaSalmo 19Señor, tú tienes palabras de vida eternaSalmo 27El Señor es mi luz y mi salvaciónSalmo 30Te alabaré, Señor, pues tú me has liberadoSalmo 51: 3-4, 18-19, 20-21Por tu amor, oh Dios, ten compasión de míSalmo 85Oh Señor, muéstranos tu amor, y sálvanosSalmo 95:1-2, 6-11No endurezcáis hoy vuestro corazón; escuchad la voz del SeñorSalmo 103:1-8, 11El Señor es compasivo y misericordiosoSalmo 119Felices los que siguen la enseñanza del SeñorSegunda LecturaRomanos 6:2-142 Corintios 5:17 - 6:2Filipenses 4: 4-9Hebreos 4:14-16Colosenses 3: 12-171 Juan 1:5 - 2:2Efesios 1:3-10Efesios 4:23-32Efesios 6:10-13, 18EvangelioMateo 4: 1-11Mateo 7:21, 24-27Mateo 9:9-13Marcos 12:28-34Lucas 7:36-50Lucas 18:9-14Lucas 23:33-43Juan 5:17-30Juan 12: 23-33Juan 20:19-23Así también ustedes, considérense muertos al pecado y vivos paraDios en Cristo JesúsNosotros somos, entonces, embajadores de Cristo y ministros de lareconciliaciónEl Señor está cerca.Vayamos, entonces, confiadamente al trono de la graciaQue la Palabra de Cristo permanezca en ustedes con toda su riquezaJesús es la expiación por nuestros pecadosEn él hemos sido redimidos por su sangre y hemos recibido el perdónde los pecadosRevístanse del hombre nuevo, creado a imagen de DiosPor lo demás, fortalézcanse en el Señor Revístanse con la armadurade DiosNo solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de laboca de DiosEl que escucha las palabras que acabo de decir edificó su casa sobrerocaYo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadoresNo hay otro mandamiento más grandeAll que poco se le ha perdonado, ama pocoEl fariseo y el publicano en el templo(El ladrón bueno) Hoy estarás conmigo en el ParaísoEl que escucha mi palabra y cree en Aquel que me ha enviado, tieneVida EternaEsta voz no se oyó por mí, sino por ustedesReciban al Espíritu Santo. Los pecados serán perdonados.12
EXAMEN DE CONCIENCIAPresidente:Hermanas y hermanos,Nuestro Padre conoce todas nuestras fallas,pero nos pide que los reconozcamospara que podamos buscar su perdón.Ministro #1: ¿Rezo a diario? ¿Recibo los sacramentos regularmente? ¿Observo los domingos y los días santos? ¿Cumplo con mis compromisos como miembro de mi comunidad de fe? ¿Cuál es mi actitud hacia el sacramento de la reconciliación? ¿He intentado crecer en la vida del Espíritu a través de la oración y lalectura de la Palabra de Dios? ¿Confío en la bondad y providencia de Dios, incluso en tiempos de crisisy duda?Ministro #2: ¿Respeto mi propio cuerpo como un don de Dios? ¿Controlo mis vicios, incluyendo los abusos de comida y bebida? ¿He hecho buen uso de los dones que Dios me ha dado? ¿Trabajo demasiado y por demasiado tiempo? ¿He descuidado de mifamilia y mi salud? ¿He sido perezoso y he dedicado demasiado tiempo al ocio o alentretenimiento?13
Ministro #1: En mi hogar, ¿he contribuido al bienestar y la felicidad del resto de mifamilia? ¿Soy paciente? ¿Soy amoroso? ¿Trato a mis padres con respeto? ¿Me enojo con aquellos que amo? ¿He sido fiel en mis relaciones?Ministro #2: ¿He impuesto mi voluntad sobre otros sin respetar su libertad y susderechos? ¿Soy intolerante a las ideas de los demás o desatento a las necesidades delos demás? ¿He perpetuado el racismo, los prejuicios y estereotipos? ¿Trato a las personas con discapacidades con respeto?Ministro #1: ¿Comparto mi tiempo y mi tesoro con aquellos que lo necesitan? ¿He ignorado a los pobres entre nosotros? ¿Me he permitido la lectura, la conversación o los entretenimientos queson contrarios a la decencia cristiana y al respeto por la vida humana? ¿Utilizo sabiamente los recursos de la tierra? ¿Suelo adquirir una gran cantidad de bienes materiales que realmenteno necesito?Ministro #2: ¿Tengo miedo de actuar de manera cristiana, temeroso de lo que otrospodrían pensar sobre mí? ¿He aceptado el sufrimiento como parte del sufrimiento de Cristo? ¿Es la esperanza de vida eterna mi inspiración para todo lo que hago? ¿Quiero sinceramente ser liberado del pecado, volverme a Dios con todomi corazón y decidirme a comenzar de nuevo?14
RITO DE RECONCILIACIÓNCONFESIÓN GENERAL DEL PECADOPresidente: Hermanos y hermanas,Recordemos la bondad de Dios nuestro Padre,y reconozcamos nuestros pecados,para poder recibir su perdón misericordioso.Asamblea: Yo confieso, ante Dios todopoderoso,y ante ustedes, mis hermanos y hermanas,que he pecado mucho,de pensamiento, palabraobra y omisión;Por mi culpa, por mi culpa,Por mi gran culpa;Por eso ruego a Santa María siempre Virgen,A los ángeles, a los santos,Y a ustedes mis hermanos y hermanas,Que intercedan por mí, ante Dios nuestro Señor.LETANÍA PENITENCIALPresidente: El Señor es misericordioso.Nos hace limpios de corazóny nos lleva a su libertadcuando reconocemos nuestra culpa.Pidámosle que nos perdone yvende las heridas infligidas por nuestros pecados.Presidente: Fuiste enviado con buenas noticias para los pobresY sanación para los corazones contritos.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú viniste a llamar a los pecadores, no a los justos.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú perdonaste los muchos pecadosde la mujer que te mostró un gran amor.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú no evitaste la compañía de los marginados y pecadores.Asamblea: Señor, ten piedad.
Presidente: Tú devolviste al rebaño la oveja que se había desviado.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú no condenaste a la mujer sorprendida en adulterio, sinoque la enviaste en paz.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú llamaste a Zaqueo al arrepentimiento y a una nueva vida.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú prometiste el paraíso al ladrón arrepentido.Asamblea: Señor, ten piedad.Presidente: Tú siempre estás intercediendo por nosotros a la derechadel Padre.Asamblea: Señor, ten piedad.PADRENUESTROPresidente: Ahora, en obediencia al mismísimo Cristo,Unámonos en oración al Padre,pidiéndole que nos perdonecomo nosotros perdonamos a otros.Asamblea: Padre Nuestro ORACIÓN DE DESPEDIDAPresidente: Señor, acércate a tus siervosque en la presencia de tu Iglesiaconfiesan que son pecadores.A través del ministerio de la Iglesia,libéralos de todo pecadopara que renovados en el espíritu,puedan agradecerte con alabanzas.Por Jesucristo nuestro Señor.Asamblea: Amén.16
CONFESIÓN Y ABSOLUCIÓN INDIVIDUAL DEL PECADOEl presidente u otro ministro puede indicar a la asamblea dónde se encontrarán losconfesores. Deberían darse algunas palabras breves sobre la manera de confesarse. Sepuede animar a la asamblea a aceptar una de las penitencias que se encuentran en laguía, o los confesores pueden imponer una penitencia adecuada a cada individuo. Sepuede aconsejar a la asamblea que permanezca en la iglesia si habrá un final común paratodos. Durante el tiempo de confesiones, se puede tocar una ligera música instrumental defondo.ORACIÓN DE ABSOLUCIÓNConfesor: Dios Padre misericordioso,que reconcilió consigo al mundopor la muerte y resurrección de su hijoy derramó el Espíritu Santo sobre nosotrospara el perdón de los pecados,te conceda, por el ministerio de la Santa Iglesia,el perdón y la paz,y yo te absuelvo de todos tus pecadosen el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.Penitente: Amén.PROCLAMACIÓN DE ALABANZA POR LA MISERICORDIA DE DIOSSe puede orar con un salmo, himno o letanía en reconocimiento del poder de Dios y sucompasión. Vea las sugerencias de música incluidas o utilice una de las citas bíblicas acontinuación.Salmo 28: 6-7Salmo 136: 1-9, 13-14, 16, 25-29Salmo 32: 1-7, 10-11Salmo 145: 1-21Salmo 54Salmo 146:2-10Salmo 66Isaías 61: 10-11Salmo 95Daniel 3:52-57Salmo 98: 1-9Lucas 1:46-55 (Magníficat)Salmo 100: 1-5Efesios 1:3-10Salmo 103: 1-4, 8-18Revelación 15: 3-417
ORACIÓN FINAL DE ACCIÓN DE GRACIASPresidente: Señor Dios,Creador y gobernante de tu reino de luz,en tu gran amor por este mundo,nos entregaste a tu Hijo único para nuestra salvación.Su cruz nos ha redimido,Su muerte nos ha dado la vida,Su resurrección nos ha elevado a la gloria.A través de él te pedimos que estés siemprepresente entre tu familia, la Iglesia.Enséñanos a ser reverentes ante la presencia de tu gloria;Llena nuestros corazones de fe,Nuestros días con buenas obras,Nuestras vidas con tu amor;Que tu verdad esté siempre en nuestros labiosY tu sabiduría en todas nuestras acciones,Para que recibamos la recompensa de la vida eterna.Por Jesucristo nuestro Señor.Asamblea:Amén.RITO DE DESPEDIDABENDICIÓNPresidente: Que el Padre nos bendigaya que somos sus hijos, nacidos para la vida eterna.Asamblea: Amén.Presidente: Que el Hijo nos muestre su poder salvador,ya que murió y resucitó por nosotros.Asamblea: Amén.Presidente: Que el Espíritu Santo nos obsequie su don de santidadY nos guíe por el camino correcto,ya que habita en nuestros corazones.Asamblea: Amén.Presidente: Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo, y EspírituSanto, descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.DESPEDIDAPresidente: El Señor te ha liberado de tus pecados. Puedes ir en paz.Asamblea: Demos gracias al Señor.18
LECTURASPRIMERA LECTURAIsaías 58:6-11Este es el ayuno que yo amo –oráculo del Señor–:soltar las cadenas injustas, desatar los lazos del yugo,dejar en libertad a los oprimidos y romper todos los yugos;Compartir tu pan con el hambriento y albergar a los pobres sin techo;cubrir al que veas desnudo y no despreocuparte de tu propia carne.Entonces despuntará tu luz como la aurora y tu llaga no tardará en cicatrizar;delante de ti avanzará tu justicia y detrás de ti irá la gloria del Señor.Entonces llamarás, y el Señor responderá; pedirás auxilio, y él dirá:«¡Aquí estoy!».Si eliminas de ti todos los yugos,el gesto amenazador y la palabra maligna;Si ofreces tu pan al hambriento y sacias al que vive en la penuria,tu luz se alzará en las tinieblas y tu oscuridad será como al mediodía,El Señor te guiará incesantemente,te saciará en los ardores del desierto y llenará tus huesos de vigor;tú serás como un jardín bien regado,como una vertiente de agua, cuyas aguas nunca se agotan.Palabra de Dios.SALMO DE RESPUESTAR. ¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado!¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecadoy liberado de su falta!¡Feliz el hombre a quien el Señorno le tiene en cuenta las culpas,y en cuyo espíritu no hay doblez!Salmo 32:1-2, 5, 6, 7
R. ¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado!Pero yo reconocí mi pecado,no te escondí mi culpa,pensando: «Confesaré mis faltas al Señor».¡Y tú perdonaste mi culpa y mi pecado!R. ¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado!Por eso, que todos tus fieles te supliquenen el momento de la angustia;y cuando irrumpan las aguas caudalosasno llegarán hasta ellos.R. ¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado!Tú eres mi refugio,tú me libras de los peligrosy me colmas con la alegría de la salvación.R. ¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado!20
SEGUNDA LECTURA1 Timoteo 6:6-11, 17-19Hermanos:Sí, es verdad que la piedad reporta grandes ganancias,pero solamente si va unida al desinterés.Porque nada trajimos cuando vinimos al mundo,y al irnos, nada podremos llevar.Contentémonos con el alimento y el abrigo.Los que desean ser ricos se exponen a la tentación,caen en la trampa de innumerables ambiciones,y cometen desatinos funestos que los precipitan a la ruina y a la perdición.Porque la avaricia es la raíz de todos los males,y al dejarse llevar por ella, algunos perdieron la fey se ocasionaron innumerables sufrimientos.En lo que a ti concierne, hombre de Dios, huye de todo esto.Practica la justicia, la piedad, la fe, el amor, la constancia, la bondad.A los ricos de este mundo, recomiéndales que no sean orgullosos.Que no pongan su confianza en la inseguridad de las riquezas, sino en Dios,que nos provee de todas las cosas en abundancia a fin de que las disfrutemos.Que practiquen el bien, que sean ricos en buenas obras,que den con generosidad y sepan compartir sus riquezas.Así adquirirán para el futuro un tesoroque les permitirá alcanzar la verdadera Vida.Palabra de Dios.21
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIOLucas 21:36Estén prevenidos y oren incesantemente,Para quedar a salvo de lo que pueda ocurrir.Así podrán comparecer seguros ante el Hijo del hombre.EVANGELIOLucas 16:19-31Jesús dijo a los Fariseos:“Había un hombre rico que se vestía de púrpura y lino finísimo y cada díahacía espléndidos banquetes.A su puerta, cubierto de llagas, yacía un pobre llamado Lázaro,que ansiaba saciarse con lo que caía de la mesa del rico;y hasta los perros iban a lamer sus llagas.El pobre murió y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham.El rico también murió y fue sepultado.En la morada de los muertos, en medio de los tormentos,levantó los ojos y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro junto a él.Entonces exclamó: ‘Padre Abraham, ten piedad de mí y envía a Lázaro paraque moje la punta de su dedo en el agua y refresque mi lengua, porque estasllamas me atormentan’.‘Hijo mío,’ respondió Abraham, ‘recuerda que has recibido tus bienes en vida yLázaro, en cambio, recibió males; ahora él encuentra aquí su consuelo, y tú, eltormento.Además, entre ustedes y nosotros se abre un gran abismo,de manera que los que quieren pasar de aquí hasta allí no pueden hacerlo,y tampoco se puede pasar de allí hasta aquí’.El rico contestó: ‘Te ruego entonces, padre,que envíes a Lázaro a la casa de mi padre,porque tengo cinco hermanos: que él los prevenga, no sea que ellos tambiéncaigan en este lugar de tormento’.Abraham respondió: ‘Tienen a Moisés y a los Profetas; que los escuchen’.‘No, padre Abraham,’ insistió el rico.
‘Pero si alguno de lo
El rico y el pobre, en efecto, mueren, y la parte principal de la parábola se desarrolla en el más allá. Los dos personajes descubren de repente que «sin nada vinimos al mundo, y sin nada nos iremos de él» (1 Tm 6,7). También nuestra mirada se dirige al más allá, donde el rico mantiene un diálogo con Abraham, al que llama
