La Educación Encierra Un Tesoro - Ateneu.xtec.cat

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LA EDUCACIÓNMiembros de la ComisiónJacques Delors, PresidenteIn’am Al MuftiIsao AmagiRoberto CarneiroFay ChungBronislaw GeremekWilliam GorhamAleksandra KornhauserMichael ManleyMarisela Padrón QueroMarie-Angélique SavanéKaran SinghRodolfo StavenhagenMyong Won SuhrZhou Nanzhao

ENCIERRAUN TESOROInforme a la UNESCOde la Comisión Internacionalsobre la Educaciónpara el Siglo XXIC o m p e n d i oEDICIONESUNESCO

La educación ola utopía necesariapor Jacques DelorsEl marco prospectivoLas tensiones que han de superarsePensar y edificar nuestro futuro comúnImplantar la educación durante toda la vida en el seno de la sociedadReconsiderar y unir las distintas etapas de la educaciónAplicar con éxito las estrategias de la reformaExtender la cooperación internacional en la aldea planetariaPRIMERA PARTE: HORIZONTES1. De la comunidad de basea la sociedad mundialUn planeta cada vez más pobladoHacia una mundialización de los campos de actividad humanaLa comunicación universalLas múltiples curas de la interdependencia planetariaUn mundo sujeto a muchos riesgosLo local y lo mundialComprender el mundo, comprender al otroPistas y recomendacionesíndi2. De la cohesión sociala la participación democráticaLa educación frente a la crisis del vinculo socialLa educación y la lucha contra las exclusionesEducación y dinámica social: algunos principios de acciónLa participación democráticaEducación cívica y prácticas ciudadanasSociedades de la información y sociedades educativasPistas y recomendaciones3. De la comunidad de basea la sociedad mundialUn crecimiento económico mundial muy desigualDemanda de una educación con fines económicosDistribución desigual de los recursos cognoscitivosLa participación de la mujer en la educación, palanca esencial del desarrolloUn cuestionamiento necesario: los daños causados por el progresoCrecimiento económico y desarrollo humanoLa educación para el desarrollo humanoPistas y recomendaciones

SEGUNDA PARTE: PRINCIPIOS4. Los cuatro pilares de la educaciónAprender a conocerAprender a hacerDe la noción de calificación a la de competenciaLa "desmaterialización" del trabajo y las actividades de servicios en e/ sector asalariadoEl trabajo en la economía no estructuradaAprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demásEl descubrimiento del otroTender hacia objetivos comunesAprender a serPistas y recomendaciones5. La educación a lo largo de la vidaUn imperativo democráticoUna educación pluridimensionalTiempos nuevos, ámbitos nuevosLa educación en el centro mismo de la sociedadHacia sinergias educativasPistas y recomendacionesceTERCERA PARTE: ORIENT ACIONES6. De la educación básicaa la universidadUn pasaporte para toda la vida: la educación básicaLa educación de la primera infanciaLos niños con necesidades especificasLa educación básica y la alfabetización de adultosParticipación y responsabilidad de la colectividadLa enseñanza secundaria, eje de toda una vidaLa diversidad en la enseñanza secundariaLa orientación profesionalLas misiones tradicionales y nuevas de la enseñanza superiorUn lugar en el que se aprende y una fuente de saberLa enseñanza superior y la evolución del mercado laboralLa universidad, espacio de cultura y de estudio abierto a todosLa enseñanza superior y la cooperación internacionalUn imperativo: combatir el fracaso escolarReconocer las competencias adquiridas gracias a nuevos modos de titulaciónPistas y recomendaciones

7. El personal docente en buscade nuevas perspectivasUna escuela abierta al mundoExpectativas y responsabilidadesEnseñar: un arte y una cienciaLa calidad del personal docenteAprender lo que habrá que enseñar y cómo enseñarloEl personal docente en acciónLa escuela y la colectividadLa administración escolarHacer participar los docentes en las decisiones relativas a la educaciónCondiciones propicias para un a enseñanza eficazPistas y recomendaciones8. El papel del político:tomar decisiones en educacióníndiDecisiones educativas, decisiones de sociedadLa demanda de educaciónEvaluación y debate públicoPosibilidades que ofrecen la innovación y la descentralizaciónAsociar a los diferentes agentes al proyecto educativoFavorecer una verdadera autonomía de los establecimientosNecesidad de una regulación general del sistemaDecisiones económicas y financierasEl peso de las limitaciones financierasOrientaciones para el futuroUtilización de los medios que ofrece la sociedad de la informaciónRepercusión de las nuevas tecnologías en la sociedad y en la educaciónUn debate que concierne en gran medida al futuroPistas y recomendaciones9. La cooperación internacional:educar a la aldea planetariaLas mujeres y las muchachas: una educación para la igualdadLa educación y el desarrollo socialFomentar la conversión de deudas en beneficio de la educaciónEn pro de un observatorio UNESCO de las nuevas tecnologías de la informaciónDe la asistencia a la colaboración en pie de igualdadLos científicos, la investigación y los intercambios internacionalesUna misión renovada para la UNESCOPistas y recomendaciones

EPÍLOGOLa excelencia en la educación: invertir en el talento,Mejorar la calidad de la enseñanza escolar,por In'am Al Muftipor Isao AmagiEducación y comunidades humanas revivificadas:una visión de la escuela socializadora en el próximo siglo,por Roberto CarneiroLa educación en el Africa actual,por Fay ChungCohesión, solidaridad y exclusión,Suscitar la ocasión,por Bronislaw Jeremekpor Aleksandra KornhauserEducación, autonomización y reconciliación social,Educar para la sociedad mundial,cepor Michael Manleypor Karan SinghLa educación para un mundo multicultural,por Rodolfo StavenhagenAbrir nuestra mente para que todos vivamos mejor,por Myong Won SuhrInteracciones entre educación y cultura con vistas aI desarrollo económico y humano: un punto de vista asiático,ANEXOS1.2.3.4.5.6.7.8.La labor de la ComisiónMiembros de la ComisiónMandato de la ComisiónAsesores extraordinariosSecretariaReuniones de la ComisiónPersonas e instituciones consultadasSeguimientopor Zhou Nanzhao

7Jacques DelorsLa educacióno la utopíanecesariaFrente a los nu m e rosos desafíos del porve n i r, la educación constituyeun instrumento indispensable para que la humanidad pueda progre s a rhacia los ideales de paz, l i b e rtad y justicia social. A1 concluir susl ab o re s , la Comisión desea por tanto afi rmar su convicción respecto ala función esencial de la educación en el desarrollo continuo de la persona y las sociedades, no como un remedio milagroso -el “A b re t eS é s a m o ” , de un mundo que ha llegado a la realización de todos estosi d e a l e s- sino como una vía, c i e rtamente entre otras pero más que otra s ,al servicio de un desarrollo humano más arm o n i o s o , más ge nu i n o , p a rahacer re t roceder la pobre z a , la ex cl u s i ó n , las incompre n s i o n e s , l a so p re s i o n e s , las guerra s , e t c.La Comisión desea compartir con el gran público esta conv i c c i ó nmediante sus análisis, sus re fl exiones y sus pro p u e s t a s , en un en quelas políticas de educación son objeto de vives críticas o son re l ega d a s ,por ra zones económicas y fi n a n c i e ra s , a la última cat egoría de pri o ridades.Quizá no sea necesario re c a l c a rl o , p e ro la Comisión ha pensadoante todo en los niños y los adolescentes, en aquellos que el día demañana tomarán el re l eva de las ge n e raciones adultas, d e m a s i a d o

8La educacióni n clinadas a concentra rse en sus propios pro blemas. La educación estambién un clamor de amor por la infa n c i a , por la juventud que tenemosque integrar en nu e s t ras sociedades en el lugar que les corre s p o n d e, e nel sistema educat ivo indudabl e m e n t e, p e ro también en la fa m i l i a , en lac o munidad de base, en la nación. Hay que re c o rdar constantemente ested eber elemental para que incl u s ive las decisiones políticas, e c o n ó m i c a sy fi n a n c i e ras lo tengan más en cuenta. Pa ra f raseando las palab ras delp o e t a , el niño es el futuro del hombre.Al final de un siglo cara c t e rizado por el ruido y la furia tanto comopor los progresos económicos y científicos—por lo demás rep a rt i d o sd e s i g u a l m e n t e-, en los albores de un nu evo siglo ante cuya pers p e c t ivala angustia se enfrenta con la espera n z a , es imperat ivo que todos los queestén investidos de alguna re s p o n s abilidad presten atención a los objet ivos y a los medios de la educación. La Comisión considera las políticas educat ivas como un proceso permanente de enriquecimiento de losc o n o c i m i e n t o s , de la capacidad técnica, p e ro también, y quizás sobret o d o , como una estru c t u ración priv i l egiada de la persona y de las re l aciones entre indiv i d u o s , e n t re grupos y entre naciones.A1 aceptar el mandato que les fue confi a d o , los miembros de laComisión adoptaron explícitamente esta pers p e c t iva y, ap oyados ena rg u m e n t o s , d e s t a c a ron la función central de la UNESCO, c o n fo rme ala idea fundacional que se basa en la esperanza de un mundo mejor,c apaz de respetar los dere chos del hombre y la mu j e r, p racticar el entendimiento mutuo y hacer del progreso del conocimiento un instru m e n t ode promoción del género humano, no de discri m i n a c i ó n .Sin duda para nu e s t ra Comisión re s u l t aba imposible superar elobstáculo de la ex t ra o rd i n a ria dive rsidad de las situaciones del mundo afin de llegar a análisis válidos para todos y a conclusiones tambiéna c ep t ables por parte de todos.Sin embargo , la Comisión trató de ra zonar dentro de un marco pro sp e c t ivo dominado por la mu n d i a l i z a c i ó n , de seleccionar las buenas preguntas que se nos plantean a todos, y de trazar algunas ori e n t a c i o n e svalidas a nivel nacional y a escala mundial.

o la utopia necesaria9El marco prospectivoEste último cuarto de siglo ha estado marcado por notables descubrimientos y progresos científi c o s , mu chos países han salido del subdes a rrollo y el nivel de vida ha continuado su progresión con ritmos mu yd i fe rentes según los países. Y, sin embargo , un sentimiento de desencanto parece dominar y contrasta con las esperanzas nacidas inmediatamente después de la última guerra mundial.Podemos entonces hablar de las desilusiones del progre s o , en elplano económico y social. E1 aumento del desempleo y de los fe n ómenos de ex clusión en los países ricos son pru eba de elle y el mantenimiento de las desigualdades de desarrollo en el mundo lo confi rm a . 1Desde luego , la humanidad es más consciente de las amenazas quepesan sobre su medio ambiente nat u ra l , p e ro todavía no se ha dotadode los medios para remediar esa situación, a pesar de marchas re uniones intern a c i o n a l e s , como la de Río, a pesar de graves adve rt e n c i a sc o n s e c u t ivas a fenómenos nat u rales o a accidentes tecnológicos. Detodas fo rm a s , el “ c recimiento conocimos a ultra n z a ” , no se puedec o n s i d e rar ya el camino más fácil hacia la conciliación del progre s om at e rial y la equidad, el respeto de la condición humana y del cap i t a ln at u ral que debemos transmitir en buenas condiciones a las ge n e raciones futuras.¿Hemos sacado todas las concl u s i o n e s , tanto respecto a las fi n a l i1. Según estudiosde la UNCTAD,el ingreso medio delos ”países menosadelantados”(560 millones dehabitantes) estádisminuyendo, y sesituaría en 300 dólaresanuales per cápita,en comparacióncon 906 dólares enlos demás paísesen desarrollo y21.598 dólares en lospaíses industrializados.d a d e s , las vías y los medios de un desarrollo dura d e ro como re s p e c t oa nu evas fo rmas de cooperación internacional? ¡Ciertamente no! Yéste será entonces uno de los grandes desafíos intelectuales y políticosdel próximo siglo.Esta constatación no debe llevar a los países en desarrollo a descuidar los motores clásicos del cre c i m i e n t o , y concretamente el indisp e n s able ingreso en el mundo de la ciencia y la tecnología con todo loque elle implica de adaptación de las culturas y modernización de lasmentalidades.O t ro desencanto, o t ra desilusión para quienes vieron en el

10La educaciónfinal de la guerra fría la pers p e c t iva de un mundo mejor y pacifi c a d o .No basta rep e t i r, p a ra consolarse o encontrar justifi c a c i o n e s , que laH i s t o ria es trágica. Todo el mundo lo sabe o debería sab e rlo. Si la última gran guerra ocasionó 50 millones de víctimas, cómo no re c o rdar quedesde 1945 ha habido unas 150 guerras que han causado 20 millones demu e rt o s , entes y también después de la caída del mu ro de Berl í n .¿ N u evos ri e s gos o ri e s gos antiguos? Poco import a , las tensiones estánl atentes y estallan entre naciones, e n t re grupos étnicos, o en re l a c i ó ncon injusticias acumuladas en los planos económico y social. Medirestos ri e s gos y orga n i z a rse para preve n i rlos es el deber de todos los dirige n t e s , en un contexto marcado por la interd ependencia cada vez mayo re n t re los pueblos y por la mundialización de los pro bl e m a s .Pe ro , ¿cómo ap render a vivir juntes en la “aldea planetari a ” si nopodemos vivir en las comunidades a las que pertenecemos por nat u ra l ez a : la nación, la regi ó n , la ciudad, el puebl o , la vecindad? El interrogante central de la democracia es si queremos y si podemos part i c i p a ren la vida en comu n i d a d. Quere rl o , no lo olvidemos, d epende del sentido de re s p o n s abilidad de cada uno. A h o ra bien, si la democracia haconquistado nu evos terri t o rios hasta hoy dominados por el totalitari s m oy la arbitra ri e d a d, tiende a deb i l i t a rse donde existe institucionalmentedesde hace decenas de años, como si todo tuviera que vo l ver a comenzar continu a m e n t e, a re n ova rse y a inve n t a rse de nu evo.¿Cómo podrían las políticas de la educación no sentirse aludidas porestos tres grandes desafíos? ¿Cómo podría la Comisión no recalcar enqué pueden estas políticas contri buir a un mundo mejor, a un desarro l l ohumano sostenibl e, al entendimiento mutuo entre los puebl o s , a unare n ovación de la democracia efe c t ivamente viv i d a ?Las tensiones que han de superarseA este fin conviene afro n t a r, p a ra supera rlas mejor, las principales tensiones que, sin ser nu eva s , están en el centro de la pro blemática delsiglo XXI.

o la utopia necesaria11La tensión entre lo mundial y lo local: c o nve rt i rse poco a poco enciudadano del mundo sin perder sus raíces y participando activa m e n t een la vida de la nación y las comunidades de base.La tensión entre lo unive rsal y lo singular: la mundialización dela cultura se realiza progre s ivamente pero todavía parc i a l m e n t e. Deh e cho es inev i t abl e, con sus promesas y sus ri e s go s , e n t re los cualesno es el menor el de olvidar el carácter único de cada pers o n a , s uvocación de escoger su destino y realizar todo su potencial, en lariqueza mantenida de sus tradiciones y de su propia cultura , a m e n az a d a , si no se presta at e n c i ó n , por las evoluciones que se están produciendo.La tensión entre tradición y modernidad pertenece a la misma probl e m á t i c a : a d ap t a rse sin nega rse a sí mismo, e d i ficar su autonomía endialéctica con la libertad y la evolución de los demás, dominar el progreso científico. Con este ánimo conviene enfre n t a rse al desafío de lasnu evas tecnologías de la info rm a c i ó n .La tensión entre el largo plazo y el corto plazo , tensión eterna peroalimentada actualmente por un predominio de lo efímero y de la instant a n e i d a d, en un contexto en que la plétora de info rmaciones y emociones fugaces conduce incesantemente a una concentración en los problemas inmediatos. Las opiniones piden respuestas y soluciones rápid a s , m i e n t ras que mu chos de los pro blemas encontrados necesitan unae s t rat egia paciente, c o n c e rtada y negociada de re fo rma. Tal es pre c i s amente el caso de las políticas educat iva s .La tensión entre la indispensable competencia y la preocupación porla igualdad de oportunidades. Cuestión cl á s i c a , planteada desde comienzo de siglo a las políticas económicas y sociales y a las políticas educat ivas; cuestión resuelta a veces pero nunca en fo rma dura d e ra. Hoy, l aComisión corre el ri e s go de afi rmar que la presión de la competenciahace olvidar a mu chos dire c t ivos la misión de dar a cada ser humano losmedios de ap rove char todas sus oportunidades. Esta constatación nos hac o n d u c i d o , en el campo que ab a rca este info rm e, a retomar y actualizarel de educación durante toda la vida, p a ra conciliar la competencia que

12La educacióne s t i mu l a , la cooperación que fo rtalece y la solidaridad que une.La tensión entre el ex t ra o rd i n a rio desarrollo de los conocimientos ylas capacidades de asimilación del ser humano. La Comisión no re s i s t i óa la tentación de añadir nu evas disciplinas como el conocimiento de símismo y los medios de mantener la salud física y psicológi c a , o elap rendizaje para conocer mejor el medio ambiente nat u ral y pre s e rva rlo. Y sin embargo los programas escolares cada vez están más re c a rgados. Por tanto, será necesario escoge r, en una cl a ra estrat egia de re fo rm a , p e ro a condición de pre s e rvar los elementos esenciales de una educación básica que enseñe a vivir mejor mediante el conocimiento, l aex p e rimentación y la fo rmación de una cultura pers o n a l .Por último, la tensión entre lo espiritual y lo mat e ri a l , que también esuna constatación eterna. E1 mu n d o , f recuentemente sin sentirlo o ex p res a rl o , tiene sed de ideal y de va l o res que vamos a llamar morales para noo fender a nadie. ¡Qué noble tarea de la educación la de suscitar en cadap e rs o n a , s egún sus tradiciones y sus convicciones y con pleno respeto delp l u ra l i s m o , esta elevación del pensamiento y el espíritu hasta lo unive rsal y a una cierta superación de sí mismo! La superv ivencia de la humanidad —la Comisión lo dice midiendo las palab ras— depende de ello.Pensar y edificar nuestro futuro comúnN u e s t ros contemporáneos ex p e rimentan una sensación de vért i go alve rse ante el dilema de la mu n d i a l i z a c i ó n , c u yas manifestaciones ven ya veces sufre n , y su búsqueda de ra í c e s , re fe rencias y pert e n e n c i a s .La educación debe afrontar este pro blema porque se sitúa más quenunca en la pers p e c t iva del nacimiento doloroso de una sociedad mu nd i a l , en el núcleo del desarrollo de la persona y las comunidades. Laeducación tiene la misión de permitir a todos sin ex c epción hacer fru ct i ficar todos sus talentos y todas sus capacidades de cre a c i ó n , lo queimplica que cada uno pueda re s p o n s ab i l i z a rse de sí mismo y realizar sup royecto personal.Esta finalidad va más allá de todas las demás. Su re a l i z a c i ó n ,

o la utopia necesaria13l a rga y difícil, será una contri bución esencial a la búsqueda de unmundo más viv i ble y más justo. La Comisión desea re c a l c a rlo enfáticamente en un momento en que ciertas mentes se ven embargadas por laduda respecto a las posibilidades que ofrece la educación.Por supuesto, h ay otros mu chos pro blemas que re s o l ve r. De elloh abl a remos más adelante. Pe ro este info rme se redacta en un en quela humanidad duda entre acompañar una evolución que no se puedec o n t rolar o re s i g n a rs e, ante tanta infelicidad causada por la guerra , l ac riminalidad y el subdesarrollo. Ofrezcámosle otro camino.Todo convida entonces a reva l o rizar los aspectos éticos y culturales de la educación, y para ello dar a cada uno los medios de comp render al otro en su part i c u l a ridad y comprender el mundo en suc u rso caótico hacia una cierta unidad. Pe ro hace falta además empezar por compre n d e rse a sí mismo en esta suerte de viaje interior jalonado por el conocimiento, la meditación y el ejercicio de la autocrítica.Este mensaje debe guiar toda la re fl exión sobre la educación, j u ntamente con la ampliación y la profundización de la coopera c i ó ni n t e rnacional con que terminarán estas conclusiones.En esta pers p e c t iva todo se ord e n a , ya se trate de las ex i ge n c i a sde la ciencia y la técnica, del conocimiento de sí mismo y de sumedio ambiente, o de la creación de capacidades que permitan a cadauno actuar como miembro de una fa m i l i a , como ciudadano o comop ro d u c t o r.Esto significa que la Comisión no subestima de ninguna manera la función central de la mat e ria gris y de la innova c i ó n , el pasoa una sociedad cog n o s c i t iva , los procesos endógenos que perm i t e na c u m ular los conoc imi en tos, a ñadir nu evos descubr i m i e n t o s ,p o n e rlos en aplicación en los dife r entes campos de activ i d a dh u m a n a , tanto la salud y el medio ambiente como la producción debienes y servicios. También conoce los límites, cuando no los frac a s o s , de los esfuerzos por tra n s fe rir las tecnologías a los paísesmás desprov i s t o s , p recisamente a causa del carácter endógeno de

14La educaciónlos mecanismos de acumulación y de aplicación de los conocimientos.De ahí la necesidad, e n t re otra s , de una iniciación temprana a la ciencia,a sus fo rmas de ap l i c a c i ó n , al difícil esfuerzo por dominar el progre s od e n t ro del respeto de la persona humana y su integri d a d. Aquí tambiénd ebe estar presente la preocupación ética.Esto también significa re c o rdar que la Comisión es consciente de lasmisiones que debe cumplir la educación al servicio del desarro l l oeconómico y social. Demasiado frecuentemente se re s p o n s abiliza deldesempleo al sistema de fo rmación. La constatación es sólo parc i a lmente justa y, s o b re todo, no debe ocultar las demás ex i gencias polític a s , económicas y sociales que hay que sat i s facer para realizar el plenoempleo o permitir el despegue de las economías subdesarro l l a d a s .A h o ra bien, la Comisión piensa, volviendo al tema de la educación, q u eun sistema más fl ex i ble que permita la dive rsidad de estudios, p a s a re l a se n t re dive rsos campos de enseñanza o entre una ex p e riencia pro fe s i o n a ly un regreso a la fo rmación constituye una respuesta válida a las cuestiones planteadas por la inadecuación entre la ofe rta y la demanda det rabajo. Un sistema así permitiría también reducir el escolar, c a u s a n t ede un tremendo despilfa rro de re c u rsos humanos que todo el mu n d od ebe medir.Pe ro estas mejoras deseables y posibles no dispensarán de la necesidad de innovación intelectual y de la aplicación de un modelo de desarrollo sostenible de acuerdo con las características propias de cada país.Todos debemos conve n c e rnos de que con los progresos actuales y esperados de la ciencia y la técnica y la creciente importancia de lo cog n o sc i t ivo y lo inmat e rial en la producción de bienes y serv i c i o s , c o nv i e n ere c o n s i d e rar el lugar del trabajo y sus dife rentes estatutos en la sociedad de mañana. La imaginación humana, p recisamente para crear estas o c i e d a d, d ebe adelantarse a los progresos tecnológicos si quere m o sevitar que se agraven el desempleo y la ex clusión social o las desigualdades en el desarrollo.P or t od as e st a s ra zo n e s , no s par ec e qu e d ebe im po ne rs e e lc o n c e pt o d e e d uca ci ón d ura n te t od a la v id a co n s us ven ta ja s d e

o la utopia necesaria15fl ex i b i l i d a d, d ive rsidad y accesibilidad en el tiempo y el espacio. Es laidea de educación permanente lo que ha de ser al mismo tiempo re c o ns i d e rado y ampliado, p o rque además de las necesarias adap t a c i o n e srelacionadas con las mutaciones d e la vida pro fe s i o n a l , d ebe ser unae s t ru c t u ración continua de la persona humana, de su conocimiento y susap t i t u d e s , p e ro también de su facultad de juicio y acción. Debe perm it i rle tomar conciencia de sí misma y de su medio ambiente e inv i t a rla adesempeñar su función social en el trabajo y la ciudad.Se ha podido evocar a este respecto la necesidad de diri gi rse hacia“una sociedad educat iva”. Es ve rdad que toda la vida personal y socialpuede ser objeto de ap rendizaje y de acción. Grande es entonces la tentación de priv i l egiar este de las casas para recalcar el potencial educat ivo de los medios modernos de comunicación o de la vida pro fe s i o n a l , ode las actividades culturales y de esparc i m i e n t o , hasta el punto de olvidar por eso algunas ve rdades esenciales. Po rq u e, si bien hay que ap rove char todas estas posibilidades de ap render y perfe c c i o n a rs e, no esmenos cierto que para poder utilizar bien ese potencial la persona deb eposeer todos los elementos de una educación básica de calidad. Mása ú n , es deseable que la escuela le inculque más el gusto y el placer deap re n d e r, la capacidad de ap render a ap re n d e r, la curiosidad del intelecto. Imaginémonos incluso una sociedad en que cada uno sería altern at ivamente educador y educando.Pa ra ello, nada puede reemplazar al sistema fo rmal de educación enque cada uno se inicia en las mat e rias del conocimiento en sus dive rs a sfo rmas. Nada puede sustituir a la relación de autori d a d, p e ro también ded i á l ogo , e n t re el maestro y el alumno. Todos los grandes pensadores cl ásicos que han estudiado el pro blema de la educación lo han dicho y lohan repetido. Es el maestro quien ha de transmitir al alumno lo que lahumanidad ha ap rendido sobre si misma y sobre la nat u ra l e z a , todo loque ha creado e inventado de esencial.

16La educaciónImplantar la educación durante toda lavida en el seno de la sociedadLa educación durante toda la vida se presenta como una de las llaves deacceso al siglo XXI. Esta noción va más allá de la distinción tra d i c i o n a le n t re educación básica y educación perm a n e n t e, y responde al reto deun mundo que cambia rápidamente. Pe ro esta afi rmación no es nu eva ,puesto que en anteri o res info rmes sobre educación ya se destacaba lanecesidad de vo l ver a la escuela para poder afrontar las novedades ques u rgen en la vida privada y en la vida pro fesional. Esta necesidad pers i s t e, i n cluso se ha acentuado, y la única fo rma de sat i s fa c e rla es quetodos ap rendamos a ap re n d e r.Pe ro además surge otra obl i gación que, t ras el profundo cambio delos marcos tradicionales de la ex i s t e n c i a , nos ex i ge comprender mejor alo t ro , c o m p render mejor el mundo. Exigencias de entendimiento mu t u o ,de diálogo pacífico y, por qué no, de arm o n í a , aquello de lo cual, p re c is a m e n t e, más carece nu e s t ra sociedad.Esta posición lleva a la Comisión a insistir especialmente en uno delos cuat ro pilares presentados e ilustrados como las bases de la educación. Se trata de ap render a vivir juntes conociendo mejor a los demás,su histori a , sus tradiciones y su espiritualidad y, a partir de ahí, c rear une s p í ritu nu evo que impulse la realización de proyectos comunes o lasolución inteligente y pacífica de los inev i t ables confl i c t o s , gracias justamente a esta comprensión de que las relaciones de interd ep e n d e n c i ason cada vez mayo res y a un análisis compartido de los ri e s gos y re t o sdel futuro. Una utopía, p e n s a r á n , p e ro una utopía necesari a , una utopíaesencial para salir del peligroso ciclo alimentado por el cinismo o lare s i g n a c i ó n .En efe c t o , la Comisión piensa en una educación que ge n e re y sea labase de este espíritu nu evo , lo que no quiere decir que haya descuidadolos otros tres pilares de la educación que, de alguna fo rm a , p ro p o rc i onan los elementos básicos para ap render a vivir juntos.Lo pri m e ro , ap render a conocer. Pe ro , teniendo en cuenta los

o la utopia necesaria17rápidos cambios derivados de los avances de la ciencia y las nu evas fo rmas de la actividad económica y social, c o nviene compaginar una cult u ra ge n e ral suficientemente amplia con la posibilidad de estudiar afondo un número reducido de mat e rias. Esta cultura ge n e ral sirve dep a s ap o rte para una educación perm a n e n t e, en la medida en que suponeun aliciente y sienta además las bases para ap render durante toda lavida.Ta m b i é n , ap render a hacer. Conviene no limitarse a conseguir elap rendizaje de un oficio y, en un sentido más amplio, a d q u i rir una competencia que permita hacer frente a nu m e rosas situaciones, a l g u n a si m p rev i s i bl e s , y que facilite el trabajo en equipo, dimensión demasiadoolvidada en los métodos de enseñanza actuales. En nu m e rosos casosesta competencia y estas calificaciones se hacen más accesibles si alumnos y estudiantes cuentan con la posibilidad de eva l u a rse y de enri q u ec e rse participando en actividades pro fesionales o sociales de fo rm ap a ralela a sus estudios, lo que justifica el lugar más re l evante qued eberían ocupar las distintas posibilidades de alternancia entre la escuela y el trab a j o .Por último, y sobre todo, ap render a ser. Este era el tema dominantedel info rme Edgar Fa u re publicado en 1972 bajo los auspicios de laU N E S C O. Sus recomendaciones conservan una gran actualidad, p u e s t oque el siglo XXI nos ex i girá una mayor autonomía y capacidad de juicio junto con el fo rtalecimiento de la re s p o n s abilidad personal en la re alización del destino colectivo. Y también por otra obl i gación destacadapor este info rm e, no dejar sin ex p l o rar ninguno de los talentos que,como tesoro s , están enterrados en el fondo de cada persona. Citemos,sin ser ex h a u s t ivo s , la memori a , el ra c i o c i n i o , la imagi n a c i ó n , las ap t itudes físicas, el sentido de la estética, la facilidad para comunicar conlos demás, el carisma nat u ral del diri ge n t e, e t c. Todo elle viene a confi rmar la necesidad de compre n d e rse mejor a uno mismo.La Comisión se ha hecho eco de otra utopía: la soc iedad ed

Las misiones tradicionales y nuevas de la enseñanza superior Un lugar en el que se aprende y una fuente de saber La enseñanza superior y la evolución del mercado laboral La universidad, espacio de cultura y de estudio abierto a todos La enseñanza superior y la cooperación internacional Un imperativo: combatir el fracaso escolar