B'omak'umal Tojol'ab'al - Kastiya - Rebelion

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Este diccionario es del tojolabal, una de las lenguas mayas que se hablan en Chiapas. Se sabe algode los tojolabales porque muchos de ellos se encuentran entre los zapatistas y los indios se suelenAlemania, y vive en México desde el añohacer conocidos cuando levantan su voz como lo han hecho desde el 1 de enero de 1994.1957. Junto a su familia vivió en la regiónEl diccionario es bastante extenso y justifica el hecho de que el tojolabal se llama una lengua contojolabal a partir de 1973. Años después yun vocabulario muy amplio y exacto para nombrar el mundo en el cual los hablantes viven. Estatercera edición revisada creció más del doble desde la primera publicación en 1979. La razón delpor razones de salud tuvo que trasladarse acrecimiento se explica por el hecho que los tojolabales siguen siendo nuestros maestros que nosenseñan ya por treinta años para que conozcamos su lengua y cultura.con los tojolabales y sus comunidades.El tojolabal como lengua maya no tiene relación con el español y otros idiomas indoeuropeos o«acusativos». Por eso, no tiene objetos porque desde la perspectiva maya todo vive. Somos puesActualmente es investigador titular del Centrouna especie entre muchas otras, hermanas y hermanos nuestros. Su lengua nos abre la puertade Estudios mayas de la UNAM, instituciónpara que entremos en un contexto no sólo desconocido, no imaginado ni soñado. Parece utópico loen la cual obtuvo su doctorado en filosofía.que afirmamos, pero es una utopía que es contemporánea nuestra y la ignoramos por quinientosaños. Nos falta escuchar lo que los tojolabales nos dicen, pero la educación que se nos impartió yLos tojolabales le abrieron los ojos hacia otrasigue impartiéndose a nuestros hijos, poco nos prepara para que sepamos escuchar. Se nos dicecosmovisión que le hizo desprenderse deque el mundo que conocemos abarca la realidad. Pero de hecho, nos muestra sólo una fracción almuchas cosas que suelen enseñarnos.otro lado de la cual están los pueblos originarios que seguimos ignorando y a quienes no escuchamos.Este diccionario nos presenta medios para acercarnos a los tojolabales. Aprender de ellos es unarealidad en la cual el NOSOTROS y no el YO o el INDIVIDUO representa el fundamento de lavida que es una convivencia con todo lo que vive: humanos, animales, plantas, agua, nubes, cerros,comales, sillas y muertos.b’omak’umaltojol’ab’al - kastiya11Publicaciones de Carlos Lenkersdorf en tojolabal yen español.- Diccionarios tojolabal-español y español-tojolabal,dos tomos, (1979 y 1981). Nuevas ediciones,revisadas y aumentadas (2004, 2006, 2007)- Tojolabal para principiantes. Lengua y cosmovisiónmayas en Chiapas. Segunda edición ampliada (2002- Cuaderno de tareas, volumen acompañante deTojolabal para principiantes (2002).Diccionario tojolobal-españolla Ciudad de México sin romper los vínculosCarlos LenkersdorfCarlos Lenkersdorf nació en 1926 en Berlín,- Los hombre verdaderos, voces y testimoniostojolabales.- San Miguel Chiptik. Testimonios de una comunidadtojolabal. Coautor junto a Gemma van deHaar (1998).- Cosmovisiones (1998).- Cosmoisión maya (1999)- Indios somos con orgullo. Poesía tojolabal. Editor,traductor y comentarios (2003).- Diario de un tojolabal. Edición del texto bilingüe ycomentarios (2001)-Filosofar en clave tojolabal (2002)- 1-2-3 b’a tojol’ab’al. Edición bilingüe (2003)Diccionariotojolabal-español- Conceptos tojolabales de filosofía y delaltermundo (2004)- La semántica del tojolabal y su cosmovisión.IIFL (2006)idioma mayense de ChiapasCarlos Lenkersdorfdiseño de portada e interiorres diseño C&C

b’omak’umaltojol’ab’al - kastiya

b’omak’umaltojol’ab’al - kastiyaCARLOS LENKERSDORFDiccionariotojolabal – español1TERCERA EDICIÓN2010

Diseño de portada e interiores:Diseño C&CISBND.R. Carlos Lenkersdorftercera edición 2010Foto en portada Carlos Lenkersdorf

ÍNDICEAgradecimientosHermanos y hermanasIntroducción al diccionario tojolabal-españolLos tojolabalesLa historia del idioma tojolabalLa lengua de hermanosUn efecto profundo del baldíoVocabularios y diccionarios¿Cómo se hizo el diccionario?RegionalismosLa formación de palabras o la morfologíaLos derivadosLos compuestosLas incorporacionesOtros aspectos sobre el idioma tojolabalLa pronunciación o la fenologíaSustitucionesLetras agregadasLas vocalesEl alfabeto tojolabalLas entradasConjugación de verbosDeclinación de sustantivos y adjetivosNombres científicosjmoj’aljel jumasa’ ja b’a 1979 jab’il kalataBibliografíaAlgunas notas para el uso del diccionarioDiccionario 53535363738404150535859

AGRADECIMIENTOSEste libro no existiera sin la colaboración de los tojolabales. Nos enseñaronsu lengua y cultura, nos invitaron a convivir y trabajar con ellos. Durante décadasde intercambio nos abrieron los ojos para ver una realidad social, política y culturalque no nos imaginamos. Así aprendimos la cosmovisión tojolabal junto con sufilosofar, tan diferentes del pensar y de la mentalidad occidental a pesar de que hansido y siguen siendo contemporáneos y vecinos nuestros por quinientos años. Porfalta de disposición, poco se aprendió de ellos no obstante su voluntad deenseñarnos. Todo esto nos motiva a expresar nuestra profunda gratitud porquecompartieron con nosotros lo que no se enseñó en ninguna parte fuera del mundotojolabal. Representan una cosmovisión y cultura que, desde la perspectivaoccidental, parece utópica porque:Es complementaria y no competitiva,se funda en el NOSOTROS y no en el YO,respeta a los otros y no se impone a ellos,sabe escuchar en lugar de mandar,la tierra es Nuestra Madre y no una mercancía,la justicia es restitutoria y no punitivatodo vive y no hay naturaleza muertala democracia es participativa y no impositivala libertad es del NOSOTROS y no del YOpor eso el NOSOTROS se extiende por todo el cosmos.En las pocas frases contrastamos las dos cosmovisiones, la tojolabal y laoccidental o de la sociedad dominante. En las yuxtaposiciones resumimos lacosmovisión que tanto nos puede explicar si escucháramos lo que nos quiere enseñar.Por todo esto repetimos nuestra gratitud por haber aprendido lo que no se escuchaen universidades y academias. Gracias hermanos y hermanas.Damos nuestras gracias también a la Universidad Nacional Autónoma deMéxico, el Instituto de Investigaciones Filológicas dentro del cual está el Centrode Estudios Mayas en el cual trabajamos y que apoya nuestro trabajo.Personalmente expresamos nuestra gratitud a Jerónimo RajchenbergCeceña, primero alumno del tojolabal, más tarde ayudante en la elaboración deldiccionario. Aprendió a hablar la lengua mayense que lo capacitó a hacer8

comentarios críticos en la explicación e inclusión de términos de importancia. Tambiéngracias a Alfonso Pérez al capturar partes importantes de la primera edición que,en aquel entonces, no se escribió con computadora sino con máquina de escribir yse imprimió por linotipistas pacientes que copiaron el tojolabal sin entenderlo.Finalmente queremos dar gracias a Aline Magaña, alumna, ayudante y colegade la clase de Tojoalabal lengua y cultura. Gracias a su colaboración se pudopreparar la tercera edición del diccionario. Corrigió los dos volúmenes con sumocuidado, por conocer bien el tojolabal. Mejoró, además, el español del tomo dos.Aprecio el afán con el cual realizó la lectura y las correcciones necesarias a lo largode más de dos mil cuartillas. Y debemos agregar que no es mayista tampoco lingüistasino economista. Y a pesar de hacer su investigación en otra disciplina, por vocacióne interés personal terminó exitosamente todas sus labores que reconozco conprofunda gratitud. Además le acompañó en el trabajo otro alumno, tambiéneconomista, Juan Cristóbal Cárdenas que nos ha brindado su apoyo para hacer laobra asequible a más interesados por medio de Internet. En efecto llevó a cabo untrabajo para el cual nuestra generación ya no es capaz. Mis palabras no sonsuficientes para expresar mi reconocimiento a los dos por la dedicación que aplicarona su trabajo de colaboración al servicio de los hermanos y hermanas tojolabales.Un abrazo de corazón para los dos.9

HERMANOS Y HERMANASAquí se nos acerca un testimonio de las raíces profundas de nuestra nación. Esla lengua de pobladores originarios de México. Son los tojolabales, uno de los pueblosmayas que viven en Chiapas, en el Sureste del país. Nos hablan en su lengua queguarda uno de los tesoros que enriquecen nuestra cultura. ¿Conocemos este caudal?¿Apreciamos su presencia que atestigua la riqueza de la mexicanidad? ¿Somosconscientes de que somos una nación multicultural y plurilingüe? ¿Sabemos que muchonos hace falta y que poco se nos enseña?Pocos aprendemos las lenguas de nuestros compatriotas. Poco se enseñan enlas escuelas. Pocos son los maestros que reciben una formación que los capacite paraenseñar esta herencia viva a sus alumnas y alumnos y a nuestro pueblo. Hablamos demulticulturalismo, pero no lo practicamos. La Constitución habla de una nación multiétnicay pluricultural, pero ¿qué se hace para aprender de las culturas y pueblos que viven yrepresentan la multiculturalidad? Hacemos proyectos PARA los indios pero no queremoshacerlos CON ellos. No reconocemos a los pueblos originarios como hermanos nuestrosy ciudadanos con los mismos derechos y obligaciones como los demás mexicanos.Este libro es testimonio de lo que saben, han conservado desde tiemposinmemoriales y pueden enseñarnos. ¿Estamos dispuestos a aprender de ellos? Tenemosla esperanza que empecemos a escucharlos y a aceptar lo que nos puedan enseñar.Pueden ampliar nuestro pensamiento y nuestro corazón. Oigan hermanos, las palabrasde ellos, hermanos nuestros. Hagámonos hermanos de ellos.10

INTRODUCCIÓN AL DICCIONARIO tojolabal-españolElaboramos este diccionario a solicitud de un grupo de tojolabales. El trabajose inició en 1976, hace ya treinta años. Se distribuyeron unos tres mis ejemplares delos dos volúmenes de este b’omak’umal, Manojo de Palabras. Aprendimos muchode la lengua y cultura tojolabal durante las tres décadas pasadas, gracias a la convivenciacon los hermanos y el trabajo con la lengua, en la elaboración continua de textos entojolabal y también de testimonios de los tojolabales para lectores hispanohablantes ylibros de texto para las clases en la Universidad Nacional Autónoma de México. Portodo eso, nos parece necesaria y justificada una revisión a fondo del diccionario.Resultó un trabajo más amplio de lo pensado. De hecho, nacieron dos libros. Por unlado, surgió una antología de conceptos que explican términos básicos del tojolabalque acercan a los lectores al filosofar de los tojolabales y a pensamientos que aclaranla cosmovisión de este pueblo maya. Por el otro, se produjo la obra que aquípresentamos, el diccionario que se amplió mucho de modo tal que aproxima a unpequeño tesauro. La razón del aumento se explica no sólo porque creció el conocimientodel vocabulario, sino que nos pareció importante contextualizar las palabras que entraronen el diccionario.Tratemos de aclarar lo dicho. Las palabras suelen abarcar un círculo amplio designificados. Así pasa en todos los idiomas. Por lo tanto, la comprensión de las palabrasexige que señalemos, hasta donde nos sea posible, la paleta extensa de cada término.Por ejemplo, tak’in puede referirse a metal, es decir, cualquier clase de metal, cualquierclase de herramienta metálica, cualquier clase de arma de tiro, dinero y muchas otrascosas hechas de metal. A cada una de estas palabras se agregan connotaciones queprofundizan y “ramifican” los referentes de cada una de estas voces. Con verbos, laramificación puede ser más amplia aún y no es necesario agregar ejemplos. Las entradasdel diccionario abren el abanico de significados.Precisamente por los ejemplos dados, el libro sigue siendo un diccionario deuso y, en particular, de uso por y para los tojolabales. Con esto no se excluye quepersonas hispanohablantes lo consulten también. Hace pocos años se instituyeron en laUNAM clases de Lengua y Cultura Tojolabal. Los alumnos del curso de dos años, porsupuesto, usan también el diccionario. Así también se dirige esta introducción a genteque habla el español. De ahí se explica la pregunta, ¿quiénes son los tojolabales?Presentamos el capítulo correspondiente de la primera edición, pero en algo actualizado.Se publicaron, además, varios libros sobre los tojolabales, historia, lengua y cultura,posterior a la primera edición del diccionario. Amplían y profundizan nuestra exposiciónanterior. Mencionamos algunas de las nuevas publicaciones que proporcionaninformaciones adicionales y, sobre todo, desde la perspectiva antropológica e histórica1.1 Mario Humberto Ruz, autor y editor, 1981-1986, 4 volúmenes. Gudrun Lenkersdorf, 1986, 1993 y 2001.11

Los tojolabalesLos tojolabales son un pueblo campesino maya que vive tanto en los Altos deChiapas como en la selva. Su región va del norte de Comitán hacia las tierras bajas enel oriente que colindan con Guatemala. Residen, sobre todo, en los municipios de LasMargaritas y Altamirano, hoy día subdividido en varios municipios autónomos,posteriores al levantamiento zapatista de 1994. Además hay tojolabales dispersos enlos municipios de Comitán, Independencia, Trinitaria y también en la depresión de laAngostura. Existen los censos que, sin embargo, varían y no dan datos confiables conrespecto al número de los tojolabales. Podemos estimar que hay, aproximadamenteentre 30,000 y 50,000 tojolabales en una región de unos 5,000 km2 más o menos.Hasta principios del siglo XX los estudiosos no hablaron de tojolabales sino quelos llamaron chañabales o chaneabales y se hicieron muchas conjeturas sobre cuálespudieran ser los “4 idiomas” chane ‘ab’ales. Posteriormente se descubrió que sedebería decir chan’ajwal, nombre calendárico, usado todavía en el siglo XVI, que dicecuatro señor, y se usó también como apellido de personas2.Eduardo Seler, al llegar a Comitán alrededor de 1900 dice:Los habitantes de la ciudad y de algunos lugares vecinos hablan un dialectomaya que ellos mismos llaman tojolabal, el idioma correcto. Es la lengua queBrasseur de Bourbourg y otros llaman chaneabal o chañabal3.De esta manera, por fin entraron en la conciencia occidental los tojolabalescon su nombre. Poco a poco atrajeron el interés de estudiosos, sobre todo a partir delos años setenta del siglo pasado. Hay que mencionar la primera investigación a fondode su lengua por Louanna Furbee-Losee 1976.Las tierras de los tojolabales en tiempos de la preconquista se extendieron del ríoGrijalva hasta la tierras altas al noreste de Comitán. Colindaron con las tierras de otrospueblos indios como por ejemplo los tzeltales y los chujes. Perdieron poco a poco sustierras durante los tiempos de la colonia y la independencia, sobre todo por la legislaciónliberal en los siglos XIX y XX que fomentó la propiedad privada sin reconocer las tierrascomunales o ejidales, típicos de la tenencia de la tierra tojolabal. El resultado fue que enel siglo XIX se convirtieron en acasillados todos los tojolabales. Con este hecho se iniciala memoria histórica de los tojolabales actuales. Nos referimos al hecho que llaman baldiyo,baldío. Desde la perspectiva tojolabal esta época quiere decir no sólo la pérdida de sustierras sino también el trabajo obligado o forzado y sin remuneración de hombres, mujeresy niños. La situación se cambió un poco en los años treinta del siglo pasado, cuando seles pagó un salario mínimo de pocos centavos o reales, como se dijo en aquel entonces.2 Gudrun Lenkersdorf, 1985: 28-31 y 77.3 Eduardo Seler, 1901: 190.12

El presidente Lázaro Cárdenas introdujo la Reforma Agraria que por goteo yatrasada llegó a Chiapas. Es decir, las tierras de algunas fincas se entregaron a lostojolabales que empezaron a formar comunidades ejidales y rancherías. El proceso deentrega de tierras, sin embargo, se extendió a veces por décadas hasta los años noventadel siglo pasado. En muchas ocasiones, se les dio la tierra cerril y se quedaron losfinqueros con las tierra húmedas y fértiles. Por lo tanto, con trabajo duro, las comunidadessacaban no más que 600 kilos de maíz por hectárea. Vivían en la pobreza, con pocasescuelas, servicios de salud mínimos, escasez de agua y de alimentación. Toda estasituación explica que la tensión iba en aumento y condujo al “·ya basta” del levantamientozapatista el primero de enero de 1994. Un poema tojolabal4, traducido al español,muestra y resume la situación.Todos nosotros en Tililté5Vamos a ver cuán difícil esComo estamos en nuestro lugarComo nos va en la milpa puesY todo aquello que sí nos faltaLuego nos toca arreglarlo bien, bien.Agua nos falta en TililtéSeca, gastada la tierra sí esHaga que quieras no pega el maízOtros no siembran el frijol yaMuchos enfermos en todo el lugarDuro nos toca vivir por acá.Se puede pensar que los tojolabales como tantos otros pueblos indios estánmarginados, viven en la periferia de la sociedad. Y, además, hay que agregar que lostojolabales tampoco tienen participación en la política. Les tocan a no tojolabales loscargos políticos al nivel de los municipios tradicionales. Por eso, se pudo concluir queson doblemente marginados. Pero no es el caso. La integración de ellos se realiza deotra manera. Es precisamente la escasez de todo, lo que los obliga a trabajar comojornaleros, mal pagados, en las fincas cercanas o en la tierra caliente. Políticamentecuentan para que den su voto al partido político en turno. Es decir, están bien integradospara apoyar y sostener el sistema vigente. Otra vez llegamos a la conclusión que lasituación socio-política condujo también al 1º de enero de 1994. La historia quedesembocó en esta fecha explica la alegría de los tojolabales en 1995 que me informaron,“hermano, ya no hay patrones en la región”. Es decir, la desigualdad de la tenencia dela tierra se acabó. Entendemos la alegría solamente si nos damos cuenta del proceso4 Carlos Lenkersdorf, 1999: 101.5 Nombre de una comunidad tojolabal.13

de siglos que los hizo perder las tierras, la libertad, la justicia y el respeto comociudadanos con los mismos derechos y obligaciones. Pero, la alegría tiene sus límites.Las región zapatista experimenta y sufre la ocupación militar.Las relaciones de desigualdad de los tojolabales con la sociedad dominantenos dan un cuadro unilateral de la situación de este y de otros pueblos mayenses.Encontramos otra realidad en medio del contexto de opresión, discriminación y faltade respeto. Nos referimos a la organización interna que los tojolabales han sido capacesde construir. Para ilustrarlo empecemos con dos experiencias ejemplares que vivimosen contacto con los tojolabales.Ya hace tiempo estuvimos por invitación en una comunidad tojolabales. Nostocó alfabetizar a la población. En la mañana a los niños, en la tarde a los jóvenes y enla noche, con velas, a los adultos. Antes de nuestra llegada la comunidad tomó elacuerdo que un hombre casado nos acompañara por turnos día y noche. No nospareció necesario, porque el hombre que nos acompañara perdía el trabajo en la milpa.Así pensamos y lo dijimos a la autoridad que nos respondió.Oye, hermano Carlos. Para nosotros, si estamos solos, nos ponemos tristes ynuestro corazón no está contento. Pero estamos alegres y contento está nuestro corazón,si estamos acompañados. Y nosotros queremos que estés alegre y contento de corazónel tiempo que estás con nosotros.El comentario del hermano nos selló la boca e invalidó lo que pensamos.Obviamente existen relaciones sociales entre los tojolabales que no sólo desconocemossino que nos trasladen a un contexto ignorado por la sociedad que nos educó y conformónuestro modo de ser y pensar. Esta enseñanza se profundizó al terminar el mes cuandoregresamos de la misma comunidad. Un grupo de comuneros nos acompañó a la paradadel camión, una caminata de unas ocho horas por veredas, cerros y cañadas. Entre losacompañantes estuvo un joven de unos once a doce años. Ya conocía Comitán adondehabía acompañado a su padre en visitas anteriores. Ahora bien, para entender el pequeñodiálogo que sigue, nos parecen necesarios algunos comentarios. Comitán es una pequeñaciudad y el centro comercial y administrativo de la región. Por supuesto, tiene luz eléctrica,agua entubada, canalización o drenaje, calles pavimentadas, cines y tiendas, hospital ymédicos y todas las demás instalaciones acostumbradas de una ciudad. En este sentidoes radicalmente diferente de la comunidad del joven. Porque no tiene nada de lasamenidades urbanas mencionadas. Al caminar se desarrolló un pequeño diálogo entrenosotros dos. Le preguntamos,- ¿Dónde te gusta vivir más, en Comitán o en tu colonia?- En nuestra colonia, nos respondió.- ¿Por qué?, le preguntamos nuevamente.- Entre nosotros hay comunidad, en Comitán no la hay.14

La respuesta final del joven profundizó la primera enseñanza recibida y, además,subrayó un principio organizativo de los tojolabales. “Tenemos comunidad”, una realidadconocida de nombre pero no vivida por la sociedad dominante. Esta regla de la vidacomunitaria la conocen adultos y jóvenes. Se manifiesta de muchas maneras. Porejemplo, ninguna casa tiene cerradura. Al salir la gente de la casa, le ponen un mecateen la puerta, para que el viento no la abra y que tampoco entren los animales. Otraspersonas que pasan, al ver el mecate, saben que no hay nadie en la casa y no entran.Comunidad, pues, quiere decir, respetar los bienes de los demás, no aprovecharse desu ausencia y tener confianza los unos en los otros. Comunidad también quiere decir,preocuparse de los demás, para que estén alegres y contentos. Por la misma razón sehacen sacrificios al considerar más importante el cuidado de los otros que las necesidadesindividuales. Comunidad, pues, equivale a complementariedad. Nos complementamosmutuamente en lugar de hacernos competencia. Comunidad, además, implica unconcepto de libertad opuesta a la concepción del mismo término en la sociedaddominante. En ella, alguien se considera libre si nada y nadie le impide tampoco leestorba. Entonces la persona esta libre si puede hacer lo que le dé la gana. En elcontexto comunitario, en cambio, los comuneros están libres si no están amarrados porsus deseos y ansias individuales. Así se está libre al complementar las necesidades delos demás.La persona preocupada por sus intereses individuales, el individualista, entojolabal el pilpil winik, es un persona no apreciada. Pero los comuneros no lo marginansino, todo lo contrario, se esfuerzan en reintegrarlo en la comunidad.En resumidas cuentas, la vida comunitaria representa una estructura social,desde la raíz, diferente de lo que encontramos en la sociedad occidental. Se contraponendos conceptos fundamentales. Por un lado, está el concepto clave para los tojolabales,el NOSOTROS. Por el otro, está el concepto clave del mundo occidental, el YO. A esteconcepto, las enciclopedias de filosofía dedican páginas y páginas. Del otro conceptono se encuentra rastro en las enciclopedias de filosofía y de las ciencias sociales.Representa una realidad desconocida y tampoco reconocida. Subrayamos, se conocela palabra NOSOTROS, pero no su realidad y vivencia en la sociedad. Muchas pueden serlas razones de esta actitud, probablemente es el freno que pone el YO y la falta deconfianza en el NOSOTROS. La autoridad, el especialista, individual o de instancia, tienela última palabra. En el NOSOTROS, en cambio, se ve la plebe, la masa que no sabe nada.Por eso, nos dijeron los tojolabales cuando nos enseñaron las primeras palabras de sulengua:Ustedes son los primeros que quieren aprender DE NOSOTROS. Aquí nadiequiere aprender de NOSOTROS. Todos nos quieren enseñar, como si no supiéramosnada. Así llegan los maestros, los médicos (si llegan), los extensionistas, losfuncionarios, los partidos y tantos más. Pero aprender DE NOSOTROS: nadie.15

En el NOSOTROS nos encontramos con una realidad no sólo desconocida ydespreciada, sino, a la vez, una aportación al altermundo. Porque realiza la sociedadde convivencia no sólo al nivel social, entre los humanos, sino al nivel cósmico. Larazón es que todo vive, plantas y animales, cerros y cañadas, nubes y ríos, cuevas ycaminos, rocas y fogones. Somos una especie entre muchas otras y nos convienehumildad, porque no somos tan importantes como se nos enseña. En pocas palabras,el tojolabal, las palabras de este idioma en este diccionario son el camino al altermundo,que nos puede transformar si estamos dispuestos a transformarnos, a formar parte deuna sociedad de convivencia, de respeto, de democracia participativa, de libertadcomunitaria, de justicia restitutoria.La historia del idioma tojolabalEl tojolabal es una de las lenguas mayas, hay más de veinte, cuyo origen es elprotomaya o la lengua madre del maya que, según la glotocronología, existía alrededorde 2000 años antes de Cristo o la era común. Desde aquel entonces las lenguasmayenses que existen hoy en día se separaron paulatinamente de su lengua madre. Deltojolabal no tenemos escritos anterior a la invasión de los europeos. Puede ser que losdocumentos que existieron fueron quemados por los españoles, porque en la regiónmontañosa de los mayas existía el conocimiento y la capacidad de la escritura. FrayBartolomé de Las Casas lo confirma elocuentemente en el texto siguiente6.p. 504, Tradiciones religiosas de los indios de Guatemala. en todas las repúblicas de aquellas grandes tierras y reinos de Nueva España y lasdemás, entre otros oficios y oficiales que había eran los que servían de cronistas ehistoriadores. Éstos tenían noticia de los orígenes de todas las cosas, así tocante a lareligión y dioses y cultu dellos, como las fundaciones de los pueblos y ciudades .Éstos cronistas tenían cuenta de los días, meses y años y aunque no tenían escripturacomo nosotros, tenían empero sus figuras y caracteres que todas las cosas que queríansignificaban, y déstas sus libros grandes, por tan agudo y sotil artificio, que podríamosdecir que nuestras letras en aquello no les hicieron mucha ventaja. Déstos librosvieron algunos nuestros religiosos, y aún yo vide parte, los cuales [505] se hanquemado por parecer de los frailes, pareciéndoles, por lo que tocaba a la religión, eneste tiempo y principio de su conversión quizá no les hiciese daño.Acaece algunas veces olvidarse algunos de algunas palabras o particularidadesde la doctrina que se les predica de la doctrina cristiana, y no sabiendo leernuestra escritura, escrebir toda la doctrina ellos por sus figuras y caracteresmuy ingeniosamente, poniendo la figura que corresponderá en la voz y sonido anuestro vocablo: así como si dijésemos amén, ponían pintada una como fuente,6 Edmundo O’Gorman, editor, 1967: 504 s, tomo 2.16

y luego llámanlo ametl, y así de todo lo demás. Yo he visto mucha parte de ladoctrina cristiana escripta por sus figuras e imágenes que leían por ellas como yola leía por nuestra letra en una carta, y esto no es artificio de ingenio poco admirable.Estos cronistas nunca faltaban, porque este oficio de padre e hijos se derivaba yera oficio en la república mucho estimado. Siempre instruía éste dos o tres hermanoso parientes de aquella familia en lo que a las historias tocaba y hacíalos ejercitaren ellas mientras vivía, y a él ocurrían cuando en algunos artículos o pasos historialesdudaban, .Las Casas, pues, documenta no sólo la existencia de la escritura y la capacidadde usarla para el tiempo de la conquista y colonización en el siglo XVI sino también lacostumbre de quemar los libros mayas encontrados por los frailes. La misma costumbrese conoce por el obispo Landa en Yucatán y el obispo Núnez de la Vega en Chiapas entiempo posteriores. No se dice que los escritos quemados fueron de los tojolabales,pero sí se nota la costumbre de quemar los libros de los indígenas por el fanatismoreligioso de los religiosos.Escribe Las Casas desde la perspectiva suya de que hubo reinos, cronistas ehistoriadores. La presencia de reyes en los Altos nos parece dudosa, por la aversióntojolabal contra los ‘ajwal, los señores, y la costumbre de asambleas populares para latoma de decisiones, costumbre prohibida en las ordenanzas de los oidores del sigloXVI. La presencia de una pluralidad de personas capaces de escribir lo atestigua LasCasas porque de cada familia se instruían dos o tres hermanos u otros familiares. Esdecir, en las familias de escribanos se multiplicaron los capacitados para escribir. Losubrayamos para señalar que, probablemente, hubo más escribanos que contadoscronistas. La falta de documentos no nos permite llegar a conclusiones definitivas.Para los tiempos de la colonia y el siglo XIX existen algunos escritos en tojolabalpor autores religiosos y de contenido correspondiente, es decir, rezos y confesionarios7.En el siglo XX, como lo dijimos ya, y sobre todo en la segunda mitad del siglo, eltojolabal se estudió de perspectivas diferentes, antropología, lingüística, arqueología ehistoria8. Se produjeron los inicios de una literatura en libros, artículos y capítulos enlibros. Se mencionan a lo largo de este diccionario y en la bibliografía.La lengua de hermanosInfluye fuertemente en la lengua, tanto hablada como escrita, la historia tojolabaldurante los siglos XIX y XX. Fue el período del baldiyo durante el cual les tocó serbaldiyano a los tojolabales sin excepciones conocidas. Es decir, perdieron sus tierras7 Louanna Furbee-Losee, 1976: 7.8 Véanse especialmente los cuatro volúmenes de Mario H. Ruz, 1981-1986.17

y la vida en comunidades. Todos se convirtieron en esclavos, los tojolabales dicenmoso. La vida acostumbrada de relaciones comunitarias, de convivencia, de trabajoscolectivos entre comuneros, las costumbres de su cultura, todo, todo dependieron delpermiso del patrón. Por más de un siglo, vivieron generaciones de tojolabales bajo esterégimen. Lo único que les quedó fue la lengua y la memoria del baldío. En ella mandaroncaporales, mayordomos y patrones o patronas.Al lograr poco a poco algo de libertad, gracias a la Reforma Agraria, tuvieronque

Así pasa en todos los idiomas. Por lo tanto, la comprensión de las palabras exige que señalemos, hasta donde nos sea posible, la paleta extensa de cada término.